En cuanto a la creatividad, no hay límites: De una Speed Twin quieres que saquemos una preciosidad como esta, hecha para no pasar desapercibida en ninguna parte.
Tal vez sea su color lo que más llama la atención, pero tiene algunos detalles personalizados más que hacen de esta moto una auténtica obra de arte sobre ruedas, creada para ser lucida y usada.
¿Te gustaría tener una parecida?